Estrenar moto es algo que no pasa todos los días, ¿verdad? Y si encima te acabas de hacer con la VOGE 900 DSX, ya tienes motivo para sentirte como un niño con juguete nuevo. Pero antes de que te emociones demasiado y quieras salir a romper asfalto, hay cosillas importantes que tienes que tener en cuenta para el rodaje. Y sí, es un coñazo, pero hacerlo bien te garantiza que la moto va a rendir a tope y sin problemas a largo plazo. Aquí te cuento todo lo que necesitas saber para que la DSX te dure lo que no está escrito.
1. Arranque suave y progresivo
Olvídate de esos arranques que parecen de película de acción, por lo menos al principio. Durante los primeros kilómetros, cuando le des al contacto, deja que el motor esté un par de minutos en marcha para que coja temperatura. Mientras tanto, puedes aprovechar para ponerte el casco, los guantes y todo lo demás. La idea es que el aceite circule y haga su trabajo en caliente. Y cuando arranques, intenta no salir dándole caña. Sé suave con el gas y deja que la moto «respire» un poco.
2. Cuida las revoluciones y la velocidad
Ya sé que es tentador ver hasta dónde puedes llegar, pero durante el rodaje hay que controlarse. Trata de no pasar de las 5000 rpm en ciudad y si sales a carretera, no superes los 130 km/h. Si tienes que adelantar a alguien y necesitas darle un apretón, hazlo sin problemas, pero luego vuelve a bajar el ritmo. La idea es no forzar el motor. Ah, y algo importante: si vas en autopista, corta gas cada tres minutillos para que el motor no esté a tope todo el rato. Así consigues que el motor se habitúe mejor a los cambios de ritmo.
3. Revisiones y mantenimiento durante el rodaje
Aquí viene lo que nadie quiere oír, pero toca. Durante el rodaje es fundamental que hagas las revisiones a tiempo. La primera, a los 1000 km, es clave. A partir de ahí, podrás empezar a darle más caña, pero siempre con cabeza. Y otra cosa, que a veces pasamos por alto: revisa el nivel de aceite. Si la moto se queda sin aceite, la has liado parda. Lo revisas con la varilla de toda la vida, pero asegúrate de hacerlo cuando la moto esté en el caballete y bien fría.
4. Engrasado de la cadena
Si eres de los que va a hacer muchos kilómetros (que con esta moto seguro que lo serás), la cadena necesita estar bien engrasada. Al principio, con la grasa que viene de serie, puedes tirar hasta los 1000 km sin problemas, pero luego cada 500-1000 km toca engrasar de nuevo. ¿Cómo hacerlo? Muy fácil. Con el caballete central, accedes a la parte de arriba de la cadena, metes un cartón para no liarla, y aplicas grasa con teflón. Así de sencillo. Y si te preguntas qué marca, da igual: Castrol, Motul, Repsol… cualquiera con teflón va bien.
5. Cuidado con el cambio semiautomático
El cambio semiautomático de la VOGE 900 DSX es una maravilla, pero hay que saber usarlo. No es automático del todo, así que si quieres cambiar de marcha sin usar el embrague, debes mantener el gas y darle un toque hacia arriba al cambio. Pero ojo, si cortas gas y luego intentas cambiar, la moto no te lo va a permitir. Así que asegúrate de hacerlo bien y aprovechar esta tecnología para tener una conducción más suave.
6. Mantén limpia la horquilla
Los bichos y la suciedad pueden acabar dañando los retenes de la horquilla, y cambiar retenes no es precisamente barato ni fácil. Un truco barato y efectivo: usa limpiamuebles como Pronto o Ceda para lubricar la horquilla. No lo apliques directamente; echa un poco en los dedos y pásalo suavemente por la horquilla. Esto ayuda a que los bichos resbalen y no se queden pegados, evitando que dañen los retenes con el tiempo.
7. Revisión de la suspensión
Aunque no es lo primero que se te pasa por la cabeza al estrenar moto, la suspensión también necesita ajustes. La VOGE 900 DSX viene de serie con una configuración bastante equilibrada, pero si sueles llevar pasajero o cargas extra, quizás tengas que endurecer un poco la suspensión trasera. No hace falta volverse loco con esto: prueba con un clic y ve ajustando según lo necesites.
8. Los primeros 1000 km: lo más importante
Recuerda, durante el rodaje, los primeros 1000 km son cruciales. A partir de ahí, podrás darle más caña y empezar a disfrutarla al máximo. Pero mientras tanto, ve con calma, cambia marchas suavemente y trata bien a la moto. Te lo agradecerá más adelante.